Las diez victorias más importantes del movimiento BDS en 2016

Al intensificar la represión contra el movimiento BDS, Israel está mostrando su desesperación e irracionalidad, dicen los palestinos. (Foto: Ryan Rodrick Beiler / ActiveStills)



Nora Barrows-Friedman

2016 comenzó con una noticia sorprendente: el gigante francés de las telecomunicaciones Orange anunció a primeros de enero que estaba desmontando su filial de Israel.

Esto ocurrió pocos meses después de que los activistas del BDS intensificaran su campaña contra la compañía por su apoyo a la agresión israelí del verano de 2014 contra Gaza y su complicidad con la colonización de Cisjordania.

La misma semana, una importante corporación irlandesa retiró sus contratos de cemento con Israel tras la presión de la campaña de boicot.

Mientras tanto, iglesias, sindicatos estudiantiles y activistas locales siguieron organizando campañas de boicot que causaron pánico entre los líderes israelíes.

Molesto por estas importantes victorias, Israel ha pasado el año 2016 librando una “guerra en todos los frentes” contra la campaña global del BDS, “en un intento desesperado de aplastarla”, según el Comité Nacional Palestino del BDS (CNB).

Acoso

Israel ha amenazado y acosado a personas individuales, adoptando políticas de expulsión de supuestos activistas del BDS y prohibiendo la entrada al país de otros.

Esto se produjo después de que un destacado diario financiero de Israel nombrara el año pasado a Omar Barguti, cofundador del movimiento BDS, una de las 100 personas que más han influido en la economía del país en 2016.

Israel impuso a Barguti la prohibición de viajar, después de que destacados ministros del gobierno israelí le hubieran amenazado a él y otros defensores de los derechos humanos de los palestinos.

Amnistía Internacional condenó las amenazas, como las que profirió el ministro de inteligencia Israel Katz en favor de “eliminaciones selectivas de civiles” del movimiento BDS, con la ayuda de los servicios de inteligencia israelíes.

“Israel ha tratado de estigmatizar, demonizar y, en algunos casos, deslegitimar a los líderes del movimiento BDS, después de haber fracasado en su intento de aplastarlo desde la base”, ha señalado el CNB. Pero lo único que ha logrado, a lo largo de 2016, es que el movimiento BDS se haya fortalecido aún más, ha dicho el grupo.

“La lógica de apaciguar la opresión del régimen israelí ha comenzado a dar paso a la lógica de la presión internacional sostenida, que fue decisiva en la lucha contra el apartheid en Sudáfrica”, añadió.

Con ese espíritu en mente, aquí están los diez éxitos más destacados del movimiento BDS en 2016, tal como fueron informados por The Electronic Intifada.

  1. Campaña contra Hewlett Packard. Activistas de una gran cantidad de ciudades de los seis continentes participaron en una semana internacional de acción contra HP, llamando la atención sobre el papel que estaba jugando la compañía en las violaciones de los derechos de los palestinos.

  2. Una compañía irlandesa retiró sus inversiones en la industria cementera israelí. Una de las empresas más grandes de Irlanda, CRH, anunció en enero que estaba abandonando sus inversiones en Israel después de una campaña popular de boicot. CRH tenía el 25 por ciento de las acciones de Mashav, propietaria de la gran cementera israelí Nesher. El cemento de Nesher ha sido utilizado en la construcción del muro israelí del apartheid y de asentamientos de Cisjordania, así como de la red de tranvías de los asentamientos de Jerusalén Este.

  3. Varios ayuntamientos españoles se han declarado “zonas libres de apartheid”. Más de 50 ciudades de toda España se han declarado libres de productos israelíes gracias a una campaña que comenzó en julio de 2014, cuando Israel atacó a la Franja de Gaza. Con más de 120.000 habitantes, Cádiz, en la comunidad autónoma de Andalucía, es una de las ciudades más grandes que han apoyado la campaña.

  4. Los noruegos rechazan los productos israelíes. Dos grandes ciudades de Noruega decidieron boicotear los productos y servicios israelíes producidos en los asentamientos de los territorios ocupados palestinos.

  5. Varias iglesias siguen defendiendo los derechos de los palestinos. Varias confesiones religiosas han decidido en 2016 boicotear a las instituciones financieras israelíes y retirar o prohibir las inversiones en aquellas corporaciones que se benefician de la ocupación israelí. Una iglesia de California prometió no comprar productos de HP, ya que suministra equipos al ejército y los asentamientos israelíes. Los presbiterianos reafirmaron sus compromisos anteriores con la desinversión, mientras 24 congregaciones religiosas hicieron un llamamiento para “presionar económicamente” a las empresas y gobiernos que violen los derechos humanos. Por su parte, los luteranos pidieron poner fin a la ayuda de EEUU a Israel.

  6. Gobiernos y partidos políticos se han opuesto a los matones anti-BDS. Suecia y, más tarde, Países Bajos e Irlanda han defendido públicamente el derecho de los ciudadanos a promover el BDS. Por otra parte, la Unión Europea y el Departamento de Estado de EEUU han reconocido que la defensa del boicot es un derecho protegido a la libertad de expresión. El Partido Verde de Canadá y el gobierno neerlandés han rechazado las presiones ejercidas por grupos de presión proisraelíes y derechistas.

  7. Los activistas han ayudado a derrotar leyes anti-BDS. Los activistas de base han luchado contra una creciente oleada de leyes promovidas por el Congreso federal y los parlamentos de los estados de EEUU —y jaleadas por grupos de presión proisraelíes y el gobierno de Tel Aviv— cuyo objetivo es reprimir el activismo BDS. En Massachusetts, una enmienda anti-boicot fue retirada en el senado del estado, en el mes de julio, gracias a una campaña llevada a cabo por grupos de solidaridad con Palestina. La enmienda, que fue incorporada en un proyecto de ley sobre cuestiones económicas que no tenían ninguna relación con aquella, habría creado una lista negra de personas y empresas que participaran en el boicot de Israel. Los organizadores dijeron que, para luchar eficazmente contra la ley anti-boicot, sabían que tenían que abordar directamente a los legisladores durante un periodo de tiempo prolongado.

    En Reino Unido, un intento de prohibir el activismo BDS fracasó en la Corte Suprema. Y en Francia, un tribunal anuló una prohibición del gobierno de una reunión de apoyo a unas personas que se enfrentan a un juicio por su activismo de solidaridad con Palestina. La campaña BDS en Francia ha seguido desarrollándose a pesar de la represión gubernamental. En mayo, los legisladores de Ontario, la provincia más populosa de Canadá, hicieron historia: su parlamento fue el primero que rechazó una ley anti-BDS.

  8. G4S se vio obligada a hincar la rodilla bajo la presión del BDS. Después de muchos años de presión de activistas del BDS, la compañía de seguridad privada más grande del mundo abandonó la mayoría de sus negocios en Israel. Cuatro organismos de la ONU en Jordania y uno en Líbano terminaron sus contratos con la corporación. La ciudad de Berkeley, California, también decidió retirar sus inversiones en las corporaciones de seguridad privada, incluida G4S, por el papel que han jugado en las violaciones de los derechos humanos de las personas indocumentadas de EEUU y de los palestinos que viven bajo la ocupación israelí.

  9. El gigante de las telecomunicaciones Orange ha abandonado Israel. La compañía francesa anunció que abandonaría Israel en enero, después de una intensa campaña internacional de boicot. La campaña, que pedía a Orange que cortara sus relaciones con sus socios israelíes, dio inicio en 2010 y contó con la participación de sindicatos y grupos de Francia, Túnez, Marruecos y Egipto, países en los que Orange y sus filiales tienen decenas de millones de clientes de telefonía móvil.

    La campaña recibió un gran impulso en mayo de 2015, cuando el movimiento BDS de Egipto llamó al boicot a Mobinil, una subsidiaria del gigante francés que tiene 33 millones de clientes. Esto se produjo después de que The Electronic Intifada revelara el grado de complicidad de Orange con la agresión israelí de 2014 contra la Franja de Gaza.

    “Orange no tuvo más remedio que darse cuenta de que invertir en la ocupación, beneficiarse de la colonización israelí del territorio palestino y coparticipar en las violaciones de los derechos de los palestinos es una mala operación comercial”, dijo Abdulrahman Abú Salem, del movimiento BDS de Egipto, una coalición de sindicatos, partidos políticos y grupos de activistas de base.

    Partner Communications, que operaba bajo la marca de Orange Israel, construyó y operó una extensa infraestructura de telefonía móvil en los asentamientos israelíes de Cisjordania, en abierta violación del derecho internacional.

  10. Fuerte apoyo estudiantil. Estudiantes de EEUU, Canadá y Reino Unido adoptaron enérgicas medidas de desinversión en sus sindicatos y representaciones estudiantiles en medio de intensas campañas de difamación lanzadas por grupos proisraelíes y oscuros sitios web.

    Los estudiantes “nos convertiremos en ciudadanos en varios sectores sociales después de licenciarnos. Y la rápidamente cambiante política sobre el conflicto palestino-israelí de los campus universitarios es algo que deberíamos tener en cuenta”, dijo un estudiante licenciado de la UCLA a The Electronic Intifada en agosto.

    Desde comienzos de 2016, más de una docena de campus universitarios de todo EEUU aprobaron alguna forma de desinversión o medidas de boicot, ha dicho Kurwa, miembro de Estudiantes por la Justicia en Palestina.

    “La gente ahora se da cuenta de que no tiene ningún sentido afirmar que eres progresista o que te preocupas por los principios básicos de igualdad y derechos humanos si no puedes aplicar esos principios a la cuestión palestina […] y a una lucha por la libertad que ya dura varias décadas”.

Nora Barrows-Friedman es redactora y editora adjunta de The Electronic Intifada, y es autora de In Our Power: US Students Organize for Justice in Palestine (Just World Books, 2014).

Este artículo fue publicado originalmente en “What were the top 10 BDS victories of 2016?”, The Electronic Intifada, 30/12/2016

Traducción: Javier Villate (@bouleusis)

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