Niños de seis años trabajan en minas de oro ilegales en Mali

Kate Thomas

Publicado originalmente en: 6-year-olds working in gold mines in Mali, says Human Rights Watch, McClatchy, 6/12/2011

Unos 20.000 niños están trabajando en minas ilegales en Mali, el tercer mayor productor de oro de África, según un informe publicado el martes por Human Rights Watch.

Muchos de los niños tienen menos de 10 años, dijo el grupo. Algunos niños entrevistados tenían 6 años. Estos dijeron que trabajan en minas improvisadas bajo tierra, cavando pozos y utilizando mercurio para separar el oro del mineral.

"Estos niños arriesgan literalmente la vida y sus miembros", dijo Juliane Kippenberg, de Human Rights Watch. "Llevan cargas que pesan más que ellos, suben por los pozos inestables y manipulan e inhalan mercurio, una de las sustancias más tóxicas que hay en la Tierra".

La organización habló con 33 niños, algunos de los cuales estaban trabajando en las minas para ayudar a sus padres. Otros llegaron a Mali procedentes de países vecinos por su propia voluntad o acompañados de sus familiares.

Un gramo de oro se vende por unos 40 dólares (30 €) en el mercado negro de Mali.

"Mali tiene duras leyes sobre el trabajo infantil y sobre la educación gratuita y obligatoria, pero lamentablemente el gobierno no las aplica completamente", dijo Kippenberg. "Las autoridades locales se benefician a menudo de la minería artesanal del oro y, por tanto, no tienen mucho interés en abordar el trabajo infantil".

Las minas artesanales de Mali exportan alrededor de cuatro toneladas métricas de oro al año, lo que supone unos 163 millones de euros. Buena parte de estas exportaciones terminan en Emiratos Árabes Unidos, en joyerías y en puestos de mercadillos.

Las minas de oro legales, nacionales e internacionales, del país producen oficialmente unas 60 toneladas de oro al año.

"Si las empresas no lo han hecho aún, deben poner en marcha procedimientos para asegurar que su oro no ha sido extraído por niños", dijo Kippenberg. "Además, deben trabajar con el gobierno y las agencias internacionales para eliminar el trabajo infantil en las minas. El boicot no es la respuesta".

Traducción: Javier Villate

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